Ideas útiles

• Resalta espacios con ellos, como puede ser la zona de estar del salón o la zona del espejo en el baño, entre otros.

• Realza objetos, sobre todo aquellos que quieres que llamen la atención, como por ejemplo cuadros, esculturas o las copas que guardas en vitrinas.

• Ilumina desde el suelo en el jardín las copas de los árboles, la fachada o simplemente señaliza el camino con los de menor intensidad.

¿Cómo conseguir una iluminación homogénea óptima?

En función del tamaño de la estancia a iluminar y del tamaño del foco de empotrar podemos jugar con su distribución. Normalmente, los de mayor diámetro tienden a una mayor luminosidad que los de tamaño menor. Por ejemplo, si quieres iluminar una habitación por igual:

• Los empotrados con diámetro de 20 centímetros o más con ángulo superior a 90º son recomendables colocarlos a 2 metros de distancia uno de otro.
• Si el diámetro es a partir de 15cm y su ángulo más de 90º, lo ideal sería una separación de 1,5 metros.
• Si los colocas con un diámetro inferior, lo mejor sería colocar uno por cada metro.
• Si crees que es mucha cantidad o no necesitas iluminar toda la estancia al completo, combina los abiertos con los cerrados e ilumina solo la zona donde realmente lo necesites.

Ideas para combinar la iluminación

• Coloca en el salón-comedor una lámpara de colgar sobre la mesa y cuatro empotrables pequeños con ángulo abierto en la zona del sofá.
• Combina en un baño de 4 metros cuadrados uno grande en el centro con ángulo abierto y dos pequeños para iluminar la zona de la pica y el espejo. Hazlo con ángulos cerrados separados 50cm entre ellos.
• Utiliza empotrables abiertos para iluminar el salón y refuerza con cerrados para iluminar la librería o el mueble del televisor.
• Ilumina la cocina con empotrables grandes abiertos y la barra americana o la mesa con empotrables pequeños con ángulo cerrado cada 50cm